El Montjuïc es uno de los pulmones verdes de la ciudad de Barcelona y uno de sus mejores miradores. Asentado sobre la colina que recorre el barrio de Sants y mira hacia el mar, Montjuïc ha sido escenario de múltiples hechos trascendentes en la historia de Barcelona.
Tras los sucesos dramáticos de la Guerra Civil, en la que el castillo funcionó como prisión, el lugar cambió y con los Juegos Olímpicos de 1992 la renovación fue total, y volvió a adquirir un carácter festivo y alegre para los barceloneses.
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El nombre de la colina, de 177 metros de altura ha sido un tema de controversia, ya que Montjuïc en catalán medieval puede traducirse como ‘monte de los judíos’, lo que está avalado por la existencia de un cementerio judío en la montaña.
Qué ver en el Montjuic
En este gran pulmón verde de la ciudad se encuentran numerosos jardines en los que pasear, descansar, jugar, hacer deporte o, simplemente, disfrutar de la naturaleza. El Jardín Botánico despliega su colección de plantas mediterráneas en un terreno marcado por fuertes desniveles que se convierte en un gran mirador.
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También se puede disfrutar de vegetación y buenas vistas en los diferentes jardines:
- Jardín de Mossèn Costa i Llobera, especializados en cactus
- Jardines de Mossèn Cinto Verdaguer, con una colección de flores de varias especies que lo hacen florecer todo el año
- Jardines de Laribal, con cascadas sorprendentes esconden la popular Font del Gat
- Jardines de Joan Brossa, unos de los más nuevos, es un refrescante parque forestal salpicado de espacios musicales, juegos y tirolinas que hacen las delicias de los niños
Repleto de instalaciones culturales y deportivas, Montjuïc ofrece cultura, naturaleza e historia todo en uno:
- Fundación Miró
- CaixaForum
- Piscinas Bernat Picornell
- Estadio Olímpico Lluís Companys
La Fuente Mágica o el Pueblo Español son también puntos de gran atractivo e interés para visitar, dentro de un espacio natural enorme y lleno de rincones secretos por descubrir.
El Pueblo Español o Poble Espanyol
El Poble Espanyol es una reproducción a tamaño real de diferentes pueblos españoles. Ubicado en una de las zonas más emblemáticas de Barcelona como lo es la montaña de Montjuic y a pocos metros de las famosas Fuentes de Montjuïc, el Poble Espanyol es uno de los principales destinos turísticos de la ciudad con sus atractivos únicos:
- Arquitectura
- Artesanía
- Arte contemporáneo
- Tiendas
- Gastronomía
Todo en un ambiente festivo, así como informativo, es un lugar ideal para adultos y niños para visitar.
Fuente mágica
Una de las atracciones más famosas de Barcelona es el espectáculo de agua, música y luces de colores que ofrece la fuente mágica de Montjuïc. La fuente ofrece varios espectáculos de unos 12 minutos, cada uno de ellos con una banda sonora diferente.
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La Fuente Mágica tiene unos 7.000 millones de combinaciones posibles de agua y luz gracias a la posibilidad que tiene de conjugar los elementos hidráulicos y de iluminación de los que dispone. Un generador de coreografías crea propuestas a partir del análisis de la pieza musical de forma automática.
Cómo llegar al Montjuic
Si no querés subir a pie, podés tomar el bus 150 en Plaza España, cuyo recorrido finaliza a los pies del castillo, en lo más alto del monte. Otra alternativa es el funicular:
Tenés que subir primero al funicular de Montjuic en la parada de metro Parallel. El funicular te dejará en la Estación del Parque de Montjuic, donde donde podrás subir al teleférico que te dejará en lo alto de Montjuic, justo donde está el castillo.
Sants-Montjuïc
El distrito de Sants-Montjuïc baja desde la montaña y se extiende por la llanura y hasta el mar. Ofrece un paseo por la historia de una Barcelona comercial, donde la diversión en los barrios es una tradición más.
Uno de los distritos más emblemáticos, Sants-Montjuïc, está compuesto de mar, montaña e historia. Los emplazamientos naturales que lo abrazan, los mercados de barrio, las plazas más animadas, los teatros más variados, los museos y las instalaciones deportivas lo han convertido en el lugar preferido de las clases medias para ir de compras y divertirse.
Vigilado por el imponente Montjuïc, uno de sus mayores atractivos, los siete barrios que conforman el distrito se extienden a los pies de la montaña, se adentran en la llanura y bajan hasta el mar por el Paral·lel, una avenida inagotable que no duerme ni de noche ni de día.
