Paisajes que parecen una postal. Playas grandes, arena blanca y mar tan azul como el cielo. Si estás buscando un lugar de descanso, diversión y desconexión, tu destino son las playas de Natal.
A diferencia de otras grandes ciudades de Brasil, Natal se caracteriza por ser ordenada y limpia. Gracias a sus días soleados, escasas lluvias y clima de verano eterno (el mar tiene una temperatura que ronda los 27° C de enero a diciembre), puede ser disfrutada todo el año.
Playas de Natal
Suele ser elegida por todo tipo de público: parejas, familias con niños, pero también jóvenes que les gusta disfrutar de sus vacaciones en la playa y tener una conexión con la naturaleza. ¿Su plus? Disfrutar de Natal no conlleva mucho tiempo porque, por suerte, todo está relativamente cerca.
¿Dónde queda Natal?
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Conocida como la Ciudad del Sol, Natal es la capital del Estado Río Grande do Norte. Ubicada al noreste de Brasil, puede ser visitada utilizando distintos medios de transporte.
- Avión: Natal tiene su propio aeropuerto a sólo 20 kilómetros de la ciudad. El Aeropuerto Internacional Augusto Severo es la principal terminal aérea de Río Grande do Norte y, además, uno de los más grandes y modernos de todo el país. Es la opción más recomendada ya que en Brasil las distancias son muy grandes.
- Auto: no es la opción que recomendamos por, nuevamente, tratarse de distancias muy largas entre una ciudad y otra. Por ejemplo, son más de 2600 kilómetros los que separan a Río de Janeiro de Natal: un viaje largo y excesivamente extenuante de más de 52 horas. Además, existen ciertos tramos en los cuales las rutas no tienen la señalización ideal, por lo tanto se torna difícil el camino.
- Barco: por el momento, sólo puede llegarse con este medio de transporte a partir de aquellos cruceros que incluyen a Natal como uno de sus destinos.
Las mejores playas de Natal
Las playas son, sin dudas, el mejor atractivo de Natal. Estas son muchas y distintas entre sí, por lo cual es recomendable visitar cada una de ellas para disfrutar sin límites.
Praia de Ponta Negra
Ubicada a sólo 12 kilómetros del centro de Natal, Praia de Ponta Negra es la playa más visitada y elegida por turistas de Brasil y toda América del Sur. Debido a su popularidad cuenta con una muy buena infraestructura de hoteles y posadas, además de construir gran cantidad de bares y restaurantes para recibir al turismo en cada momento del año.
Los días son agitados y sin pausas. Por eso, los más inquietos pueden aprovechar su paso por Ponta Negra para practicar algún deporte bajo el sol o alquilar un barco.
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Sus playas tienen 4 kilómetros de largo, con vistas increíbles. Una de las más apreciadas es la que se obtiene desde Morro do Careca, una duna de gran altura y llena de vegetación. Hasta hace unos años, trepar el morro era una de las actividades más apreciadas por quienes visitaban la playa, pero debido a la creciente llegada de turistas, cerraron su paso.
Mientras caminás por su cálida arena podés parar a comer mariscos, disfrutar del sabroso acai, o tomar algún trago con vista directa al mar.
Praia dos Artistas
Ubicada a unos pocos kilómetros del centro de Natal. Elegida también por los más jóvenes, los locales y los amantes de las olas, ya que en sus playas se puede practicar surf.
Hace algunos años, fue la playa de moda en Natal. A ella concurrían los artistas más prestigiosos del país, motivo que le dio nombre a la playa. Hoy en día, perdió dicho puesto con el crecimiento de Ponta Negra, aunque los locales siguen eligiéndola día a día.
Es por esto que realmente no es la playa más recomendada para los turistas, ya que el barrio no es de los más seguros.
Praia do Forte
Gracias a sus brisas constantes, esta es la playa más elegida para los amantes de los deportes acuáticos que requieren del viento, como el windsurf o el kitesurf.
También es recomendable para familias con chicos ya que se encuentra rodeada de arrecifes que forman piletas naturales, ideales para que disfruten los más pequeños.
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La playa rodea un monumento digno de conocer: el Forte dos Reis Magos. Esta fortaleza, construida por los portugueses en 1598, fue concebido con el fin de proteger a la ciudad de los ataques franceses. La muralla ofrece, además, una de las mejores vistas de todo Natal.
Qué hacer en Natal
Por su gran diversidad de playas, Natal permite realizar muchas actividades distintas. Desde recorrer las diferentes playas en buggy, hasta visitar lugares históricos. Natal permite disfrutar de una estadía sin aburrirte ni un minuto.
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La ciudad también es muy amiga de los deportes acuáticos. Por este motivo, uno puede elegir entre hacer deportes extremos (como surf, kitesurf o windsurf), aprender a bucear, hacer snorkel o hasta excursiones en barco. Opciones hay muchas, ¡lo difícil es elegir una!
Vida nocturna
La noche tampoco hace exclusiones de edad. Para los más jóvenes que buscan una vida nocturna más activa, recomendamos acercarse a Praia do Ponta Negra. Hay grandes opciones para salir a bailar, probar los más sabrosos mariscos y tomar ricos tragos hasta largas horas de la noche. Otras personas simplemente eligen sentarse en la calle mientras disfrutan de sus caipirinhas.
La noche es también uno de los mejores momentos para degustar de los platos preferidos de Natal. Algunos elegidos de la zona, como los frutos de mar, los camarones al ajillo, el pastel de langosta y la sopa de cangrejos, acompañan perfectamente a la clásica feijoada.
Pero cuando el sol baja y la arena se enfría, la playa de Ponta Negra es sede principal de fiestas. En estos clásicos eventos, el baile, la música y las cervezas frías son protagonistas absolutos. Tené en cuenta, además, de que no hace falta que esperes al fin de semana. En Natal, todos los días hay algo para hacer.
Excursiones en Natal
Con el sol resplandeciente desde temprano, Natal presta sus días para hacer todo tipo de excursiones. Conocé las más elegidas entre los turistas que pisan la ciudad:
- Snorkel en Maracajaú: conocido como el Caribe Brasileño, Maracajaú está a sólo 70 kilómetros de Natal. Tras un pequeño viaje en lancha, todos expertos y no tanto podrán sumergirse en las aguas del Atlántico. Allí, corales y peces de colores deslumbran a todos los visitantes. Un día completo de relajación a pleno contacto con la naturaleza.
- Pura diversión en Manoa Park: se trata de uno de los mejores parques acuáticos de Brasil, ubicado al lado de la playa de Maracajaú. No sólo es recomendado para familias con niños: aquí todos se divierten. Deslizarse sobre toboganes gigantes, nadar en piscinas con corriente de agua, disfrutar de un trago fresco en los bares acuáticos y relajarse con los hidromasajes son sólo algunas de las actividades disponibles.
- Paseo en barco hasta el Morro do Careca: la vuelta en jangalancha (un híbrido entre una lancha y una jangada, típica embarcación de la zona) dura cerca de dos horas. Durante todo este tiempo, uno puede contemplar los distintos paisajes que se presentan y hasta darse un baño en las aguas de Praia Alagamar. Algunos afortunados también pudieron ver de cerca como los delfines saltan entre las olas. ¡Alucinante!
Pipa
Sin lugar a dudas, la mejor opción y la más elegida de todo Natal. Familias con hijos chicos, parejas y grupos de amigos desean visitarla para disfrutar de su gran variedad de playas. Los surfistas la eligen para dejarse llevar por sus olas. Otros jóvenes (y no tanto) se quedan tan enamorados de sus hermosos paisajes que deciden quedarse a vivir allí.
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A sólo 80 kilómetros de Natal, Pipa es un paraíso único. A pesar de tener un estilo más bohemio que otras playas de Natal, tiene una desarrollada oferta hotelera para todos los gustos y presupuestos.
Está a tan sólo hora y media en auto o bus de Natal. Muchos turistas eligen viajar a Natal en avión, permanecer uno o dos días allí mientras recorren la ciudad y luego terminar las vacaciones en Pipa
Las playas de Pipa son distintas entre sí, aunque en todas podés disfrutar de su agua cristalina y tibia, así como de las caminatas sobre su arena blanca.
Playas de Pipa
- La playa del centro suele ser una de las más elegidas en la zona. Se trata de una playa extensa, ideal para las familias debido a sus aguas tranquilas y a la diversa oferta de bares, restaurantes y actividades que pueden realizarse en ella.
- Bahía dos Golfinhos es donde los delfines suelen hacer sus apariciones. Muchas veces, incluso llegan a acercarse a la orilla en busca de comida o para jugar en sus aguas. A diferencia de otras playa, esta no cuenta con bares que puedan ofrecer comida o refrescos. Por eso, tené en cuenta llevar tus provisiones.
- Praia do amor es otra de los clásicos de Pipa. Esta playa logra reunir el clima aventurero de quienes deseen practicar surf, pero también el espacio ideal para descansar sin reparos. Suele ser la más elegida por las parejas, de allí su nombre.
Mientras las familias juntan sus cosas al atardecer, los más jóvenes saben que irse no es una opción. La fiesta comienza en la playa, y lentamente se va trasladando a Avenida Bahía dos Golfinhos, la calle con más bares de la zona.
Es allí donde la música fluye entre el reggae, el rock, la samba y hasta cuenta con la presencia de DJ’s que pinchan sus discos en vivo.
