
Empacar es, para muchas personas, la parte más estresante de un viaje. Pero con algunos trucos simples y una planificación estratégica, es posible reducir el equipaje, mantener todo organizado y ganar tranquilidad desde el primer momento. En este artículo, te mostramos cómo empacar de forma eficiente, aprovechando al máximo el espacio disponible y evitando complicaciones innecesarias.

Menos es más: lo primero es reducir
La ropa suele ocupar la mayor parte del equipaje, así que la clave está en empacar solo lo necesario. Una técnica infalible es armar tu lista inicial… y luego eliminar una o dos prendas. Suena radical, pero funciona.
También puedes usar el método 5,4,3,2,1, ideal para viajes de una semana:
- 5 pares de ropa interior y calcetines
- 4 prendas de arriba
- 3 pantalones o faldas
- 2 pares de zapatos
- 1 sombrero y un accesorio
Otra fórmula útil es la proporción 3:1: tres prendas superiores por cada prenda inferior. Y si te cuesta limitarte, lleva una mochila de mano o bolso pequeño: el espacio reducido ayuda a empacar con criterio.
Los aliados ideales: cubos de embalaje
Los cubos de embalaje son herramientas clave. Permiten comprimir la ropa, organizarla por tipo y aprovechar el espacio de forma muy eficiente, especialmente si vas a visitar varios destinos. En cuanto a la ropa, no importa tanto si la doblás o la enrollás, pero podés:
- Enrollar camisetas y ropa interior
- Doblar camisas, pantalones o prendas más estructuradas

Cómo organizar tus artículos de tocador
Para evitar derrames y cumplir con las normas de seguridad, lo ideal es llevar los líquidos en una bolsa Ziploc dentro de un neceser compacto y fácil de acceder. Algunos productos como el Sea to Summit Ultra-Sil o el Peak Design Wash Pouch ofrecen soluciones ligeras y con varios compartimentos.
Además, es recomendable llevar pequeños frascos de productos multiusos o versiones sólidas de shampoo o jabón, que ocupan menos espacio y son más prácticos.
Otros accesorios que te pueden ayudar
- Bolsas impermeables pequeñas: ideales para objetos aceitosos o propensos a derramarse.
- Bolsa enrollable: útil como bolsa de lavandería o para ropa mojada en caso de lluvia.
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