Dicen que el humor salva hasta en las peores situaciones y que enfrentar algunas cosas con una sonrisa y mirando algún costado positivo puede cambiar radicalmente una experiencia. Y Mónica y Claudia López, dos hermanas de 62 y 67 años de Capital Federal, acaban de confirmarlo. Se perdieron en la selva tucumana 48 horas y grabaron un video desopilante.
Mónica y Claudia viajaron a la provincia de Tucumán por turismo. El domingo, temprano, decidieron alquilar un auto para conocer el monte San Javier y caminaron por un sendero hacia una cascada. Llegaron, tomaron fotos pero, al regresar, erraron el rumbo y terminaron perdidas.
Estuvieron 48 horas en la selva, durmieron dos noches "colgadas en los árboles" y sobrevivieron gracias al agua que cargaban para tomar mates fríos y medio paquete de bizcochos de grasa
Las hermanas se perdieron el domingo a las dos de la tarde y fueron rescatadas el martes a las 20, en medio de la oscuridad de la selva de yungas tucumana. Fue ahí que contaron su experiencia: "Empezamos a buscar la manera de seguir el arroyo con las piedras, caminamos y caminamos desesperadas sin rumbo. Empezamos a gritar socorro pero nos dimos cuenta que no había nadie cerca".
Desorientadas, el lunes a la mañana grabaron un video para enviar a sus familias pero no había señal.
Sus celulares solo servían para iluminar de noche. Pasaron dos noches allí y se taparon con plantas. Al día siguiente el sol le devovió el calor. "A la noche siguiente encontramos un fuego que todavía estaba prendido y decidimos pasar la segunda noche ahí. Comíamos un bizcocho a la mañana, uno a la tarde y uno a la noche".
Ya al tercer día empezaron a desesperar. No tenían agua ni comida y el frío se hacía sentir. A la noche, cuando ya disponían a enfrentar otra noche dura, escucharon que había gente. "Cuando escuchamos las voces nos largamos a llorar de la desesperación", contaron.
Los resctatistas habían localizado la zona gracias a la señal del celular. Uno de los empleados de la empresa donde habían alquilado el auto, Hertz, logró hallarlas en la zona de La Cascada del Río Noque, a cinco kilómetros del auto.