Bangkok cuenta tanto con el encanto clásico y cultural que se desprende en todo el país, como con las comodidades modernas, a veces mostradas al viajero de una forma aparentemente caótica, pero siempre con esa sonrisa amable, seña de identidad de la hospitalidad tailandesa.
La capital del reino, Bangkok o Krung Thep, “la ciudad de los ángeles”, como se la conoce entre sus habitantes, ha crecido y se ha desarrollado como una ciudad cosmopolita del siglo XXI, con más de 10 millones de habitantes.
Mientras que al principio, la inmensidad de la ciudad y sus calles vibrantes y llenas de vida pueden llegar a intimidar al viajero, después se enamorarán rápidamente de cada uno de sus rincones por todo lo que ofrecen:
Desde exóticos templos que hablan por sí solos de la arraigada historia budista de Tailandia, hasta los modernos centros comerciales que han convertido a las compras, en una parte fundamental de las vacaciones en Tailandia.
La estancia en Bangkok incluye una visita al Gran Palacio Real, posiblemente la primera atracción turística de la ciudad:
Situado en el corazón de la isla de Rattanakosin, las relucientes torres del Gran Palacio están convenientemente situadas cerca de los templos más espectaculares de Bangkok, incluyendo el Templo Buda de Esmeralda (Wat Phra Kaeo):
El Templo del Amanecer (Wat Arun) y Wat Pho, especialmente conocido por acoger al enorme Buda Reclinado, una figura con 46 metros de largo y 15 metros de altura, que fue hogar de la primera escuela de masaje tailandés del país.
Estos destinos emblemáticos son algunas de las principales atracciones para todos aquellos que viajen a Bangkok buscando la esencia de las tradiciones culturales únicas de Tailandia.
De hecho, hay más de 400 templos budistas en funcionamiento por toda la ciudad y no es de extrañar encontrarse con monjes vestidos con sus túnicas color azafrán recogiendo limosnas o moviéndose a lo largo y ancho de la urbe.
El serpenteante Chao Phraya “Río de Reyes”, está conectado por numerosos canales, por lo que Bangkok se ha ganado el sobrenombre de la “Venecia de Oriente”.
El visitante puede disfrutar de un crucero por sus aguas, además de visitar un mercado flotante o explorar los khlongs o canales que discurren por Bangkok, todos ellos atracciones por sí mismas.
Otros lugares de interés histórico y cultural son el Museo Nacional, la Mansión Vimanmek y el Palacio Suan Pakkad, auténticos tesoros nacionales.
Más allá del casco histórico de Bangkok, hay una gran variedad de rincones que sorprenderá a más de uno. Los distritos del centro Silom y Sukhumvit tienen un sistema de tren eléctrico, el famoso Sky Train (el metro aéreo de Bangkok), así como una red subterránea que permite al viajero moverse por la ciudad de una forma rápida y sencilla.
Conectando directamente los hoteles con centros comerciales y mercados tradicionales, el shopping en Bangkok logró un estatus de primera categoría.
Si la finalidad de la estancia en el País de la Sonrisa es sumergirse en su cultura única, viajar a la “Ciudad de los Ángeles” garantiza la experiencia fascinante de vivir el estilo de vida tailandés en una sola parada.
CONSEJOS
Es mejor parar los taxis que ya están circulando ya que generalmente utilizan el contador, mientras que los taxis estacionados normalmente tienen tarifas fijas más altas o darán al viajero el típico “paseo”.
Durante los meses de la estación del monzón, de junio a septiembre, las lluvias vienen de forma rápida sobre todo por la tarde. Son aconsejables calzado adecuado y un paraguas.
Fuente: turismotailandés