Manzanilla, trajes de flamenca, mucho baile, pescaíto frito y mucha seducción. Dicen que en 1847, gracias al olfato comercial de dos concejales sevillanos de adopción, las fiestas precristianas de la primavera ocuparon un lugar clave en la economía, sociedad y cultura de la ciudad que dura hasta nuestros días.
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La Feria de Abril
La Feria de Abril se inauguró con 19 casetas y en la actualidad el número asciende a más de mil. La actividad que genera supone un periodo vital tanto en la generación de empleo como en el impacto económico de la capital andaluza.
La Feria de Abril de Sevilla 2019 se celebrará del 4 al 11 de mayo
Será la tercera ocasión en la que la Feria de Abril no se celebre en abril. Ya sucedió lo mismo en 2011 y en 2014 por idéntico motivo. Porque la Semana Santa de Sevilla 2019 será tardía, del 14 al 21 de abril. Y el Ayuntamiento quiere que entre estas dos grandes fiestas en Sevilla haya dos semanas de separación.
Diversión, alegría, color y fiesta de la primavera te permitirán disfrutar de días inolvidables
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La Feria se inaugura a las 24:00 horas, con el espectacular encendido de miles de bombillas, que iluminan la puerta principal y las calles del recinto.
Comer y beber es uno de los principales placeres que disfruta todo visitante en la Feria de Sevilla. Casetas y multitud de puestos ambulantes, ofertan una amplia gama de manjares que permiten al público satisfacer su apetito en cualquier momento.
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Los orígenes de la Feria de Abril se remontan al año 1846, por un decreto de la Reina Isabel. Al principio, como en la mayoría de las ferias, comenzó siendo una feria ganadera de tres días, en la que también se tomaba algo.
Aunque empezó como un evento comercial, a lo largo de los años, se ha ido transformado hasta convertirse en una expresión del canto y baile sevillano.
Mientras dura la fiesta la gente viste los trajes típicos andaluces: los hombres con la indumentaria campera tradicional, y las mujeres con el vestido flamenco o de gitana.
Por el día, la feria se llena con cientos de amazonas, jinetes y carruajes ricamente adornados.
Es el llamado paseo de caballos, en el que se puede participar alquilando una calesa con conductor del servicio regular.
Al lado del recinto ferial se sitúa la Calle del Infierno, una zona lúdica muy animada, con multitud de atracciones para niños y adultos y puestos donde tomar una bebida o un refrigerio.
Otro elemento imprescindible son los toros: cada tarde la Plaza de la Maestranza se llena para presenciar la correspondiente corrida (las entradas y abonos se pueden adquirir anticipadamente llamando por teléfono o en la página web de la propia plaza).
Y tras una semana de diversión, un impresionante espectáculo de fuegos artificiales, el domingo a medianoche, despide la Feria de Abril hasta el año siguiente
Consejo: Para no perderte esta celebración, es recomendable reservar hospedaje con antelación.