A 1,950 kilómetros de la costa sudoeste de África y a 2,900 kilómetros de Sudamérica, en el corazón del Océano Atlántico Sur, se ubica la isla de Santa Elena. Con una superficie de un poco más de 120 kilómetros cuadrados, este territorio británico posee una riqueza cultural e histórica única.
Ahora, una de las islas más remotas del mundo está a punto de entrar en la era del turismo moderno con el inicio de vuelos comerciales.
La compañía Airlink inaugura este sábado 14 de octubre su vuelo semanal hacia Jamestown, capital de Santa Helena, desde Johannesburgo, Sudáfrica, para gran satisfacción de los 4500 habitantes de la isla que esperaban esta opción para fortalecer las finanzas del lugar con un anhelado boom del turismo.
Santa Helena, la isla en medio del océano
La isla de Santa Helena es la más grande de un conjunto de islas que dependen administrativamente de ella: las islas de Ascensión y de Tristán da Cunha, base de “operaciones” para miles de tortugas marinas, cuenta con algo más de 1.000 habitantes, todos ellos trabajadores del Reino Unido (principalmente de la BBC) o de Estados Unidos (militares).
Se trata de un lugar aislado, que parece vivir anclado en una extraña calma, como si todo se mantuviera en un equilibrio misterioso dentro de los límites del islote. Al cruzarnos con la gente de Jametown, asentamiento de población principal, nos recibirán con un saludo casi cantado y con una sonrisa expansiva dibujada en sus rostros.
Los contrastes del paisaje son asombrosos, pasando de las praderas y montes de un verdor inusitado, a compartir escenario con la aridez de sus riscos de naturaleza volcánica.
Pero, más allá de la biodiversidad, de la flora y la fauna tropicales y abundantes, los paisajes alucinantes y su arquitectura georgiana de casas coloridas, el principal atractivo de Santa Helena es el haber albergado a Napoleón durante sus últimos seis años de vida.
Allí murió el ex emperador de los franceses, el 5 de mayo de 1821, a los 51 años, y allí descansó en un sitio por él mismo elegido hasta la repatriación de sus restos a Francia, en el año 1840.
Otro lugar para visitar es Plantation House, la antigua residencia del gobernador de la isla construida en 1792… así como la de Jonathan, el animal vivo más viejo del mundo, una tortuga gigante que tiene alrededor de 180 años de antigüedad. Hay visitas ocasionales, aunque el Paddock (donde viven las tortugas) está abierto durante el día.
Tambien se puede visitar el Bosque del Milenio, casi 5.000 árboles gumwood que se plantaron como una iniciativa de conservación para conmemorar el milenio.
Los turistas finalmente llegarán
El año pasado, una inauguración fallida del aeropuerto de Santa Elena se convirtió en escándalo internacional. Debía estar operativo en junio de 2016, pero al parecer los estudios de factibilidad no estaban bien hechos y los ensayos de aterrizaje se frustraron por violentas turbulencias.
La solución encontrada por la Compañía para hacer turísticamente operativo el aeropuerto -desde su inauguración sólo se usa para evacuaciones médicas urgentes o pequeños vuelos privados- ha sido la de cambiar el tipo de aparato y reducir el número de pasajeros para hacer los vuelos más livianos. En vez de los Boeing 737 previstos se usarán los Embraer. Y sólo se ocuparán 76 de las 99 plazas que ofrecen. Aún así, habrá que tener temple para soportar aterrizajes turbulentos.