La mística todavía rodea los Juegos de las Highlands de Escocia, que consisten en un enfrentamiento tradicional de titanes que se remonta a siglos atrás.
Se sabía que los jefes de los clanes seleccionaban a los corredores más rápidos como mensajeros, a los competidores más aptos y temibles como guardaespaldas y a los mejores bailarines y músicos para su entretenimiento. De igual modo, esta antigua tradición también se utilizaba para encontrar un marido adecuado a alguna de las hijas de un jefe importante de los clanes.
Hoy en día, más de 60 juegos son organizados en ciudades y pueblos de toda Escocia entre mayo y septiembre. Algunos incluso se celebran en los sugerentes terrenos de los castillos, como los juegos del Castillo Drumtochty o los Juegos de las Highlands de Strathmore en el Castillo Glamis, la impresionante fortaleza del siglo XIV inmortalizada en Macbeth de Shakespeare.
Al reunir a las comunidades en una colorida celebración del patrimonio de Escocia, los juegos de las Highlands del siglo XXI ya no se realizan para demostrar las habilidades para hacer la guerra. Son grandes reuniones sociales con un eléctrico ambiente festivo, que atraen a miles de personas cada año y constituyen uno de los eventos de Escocia que no te podés perder. El más grande, el Cowal Highland Gathering, acoge habitualmente a multitudes de más de 10.000 personas para animar a los competidores que muestran su fuerza hercúlea. Los espectadores pueden ver con asombro cómo los participantes con kilts compiten en eventos como el lanzamiento de tronco, arrojar el martillo, lanzar la bala y el juego de tira y afloja. No hay dos juegos iguales, con gran variedad de eventos, alimentos, baile y música para saborear en cada uno.