La taberna de Moe es una cueva legendaria y decadente, propiedad del personaje Moe Szyslak. Esta taberna es el refugio de Homero y de otros miembros de la comunidad de Springfield, es un antro que funciona como símbolo crítico del “american dream”, el sueño americano.
Ahora, esta taberna, lugar épico de la ficticia Springfield, se replicó en Ituzaingó en forma de bar estructuralmente idéntico.
Así lo mostró la foto que el dueño de la idea, Damián Díaz (35), subió ayer a su cuenta de Facebook a las 18.15 y que explotó en las redes en sólo 24 horas.
La idea, en rigor, surgió de Damián Díaz hace seis meses, pero el que se encargó de la estructura fue su padre, Rubén Díaz, que es arquitecto.
El lugar que utilizaron —ubicado en las calles Martín Rodríguez y Laprida, a unas diez cuadras del centro— era una propiedad de locales viejos que había comprado Rubén y que, tras conocer la idea de su hijo, encajó perfecto para convertirse en la famosa taberna.
De Springfield a Ituzaingó es su frase. El fanático de Los Simpsons replicó en medio de ese barrio residencial del conurbano el bar donde Homero suele dejarse caer para una cerveza, el bar de Moe.
La versión local es un calco: las paredes violetas, las mismas cortinas, el cartel de Moe sobre la puerta.
Por dentro la taberna también será idéntica a la de Moe. Tendrá la misma decoración, habrá un teléfono para recibir llamadas conectado a un altoparlante, emulando las llamadas burlonas de Bart a Moe. También muñecos, souvenirs, la cerveza Duff.
En el techo habrá gigantografías de “Los Borbotones”, la banda de Homero, Barney, Apu y Skinner, una parodia-homenaje a Los Beatles cuya mítica escena de la azotea remitía al último concierto de los cuatro de Liverpool en una terraza Londres.
Dentro de la música que se pasará en la taberna estará la de Los Borbotones
“Miro a los Simpsons desde que puedo mirar la tele, soy de los que lo miran cuando los engancha en la tele”, cuenta Damián. Pero aclara: “Me encantan, pero no soy fanático ni la idea surgió por fanatismo. Sabía que no había nada así en la zona, que no iba a ser difícil de armar y que podía salir algo copado. Pensé que iba a tener repercusión, ¡pero no tanta!”.
La taberna de Moe del ‘conur’ no está en un lugar gastronómico ni céntrico, sino en una zona tranquila de barrio. Para ir, cuando sea inaugurado, deberá ser con reserva previa.
