El puente Alejandro III es el puente más largo y emblemático de todo París. Está ubicado en uno de los lugares más míticos de la capital francesa, conectando la explanada de Los Inválidos con el Grand Palais y el Petit Palais. Flanqueado por cuatro grandes columnatas, es el rincón perfecto para disfrutar observando la ciudad y la Torre Eiffel.
Los puentes unen orillas, acercan personas y saltan obstáculos
Hoy te invitamos a seguir descubriendo los puentes más emblemáticos del mundo elegidos por la comunidad de viajeros de minube.
Puente de los 17 arcos en Pekín, China
El Puente de los 17 arcos se localiza en el Lago Kunming en el Palacio de Verano, la residencia estival de los emperadores chinos. El puente, de unos 150 metros, está presidido por un impresionante Buey de bronce y une a tierra la isla de Nanhu en el centro del lago.
Golden Gate en San Francisco, Estados Unidos
El famoso Golden Gate es uno de los símbolos más destacados de la costa oeste de Estados Unidos. Su color rojo se puede adivinar desde muy lejos si el tiempo lo permite.
Puente Romano de Córdoba, España
Recorrer este puente o simplemente observarlo es recorrer 2.000 años de historia. Cuando atardece se puede observar una de las estampas más bonitas de Córdoba, con la Mezquita-Catedral de fondo.
Tower Bridge de Londres, Reino Unido
Sus dos torres son de estilo neogótico y sirven para elevar el puente más de mil veces al año y dejar pasar los barcos que navegan por el Támesis. Al este de la ciudad se eleva este puente que une la Torre de Londres y el barrio de Southwark, siendo uno de los lugares más fotografiados de Londres y del mundo.
Ponte Vecchio en Florencia, Italia
La traducción de su nombre es "puente viejo" y se lo ha ganado por haber sobrevivido a grandes inundaciones y sucesos históricos. Este lugar ha visto transitar la historia del norte de Italia. Sus famosos puestos comerciales le dan ese aspecto bucólico que lo caracteriza.
Puente de Brooklyn en Nueva York, Estados Unidos
Con más de 120 años este puente icónico es uno de los grandes testigos de la historia de Nueva York. Se encuentra situado al sur de Manhattan y lo une con Brooklyn, como su nombre indica. Con casi dos kilómetros, en su momento fue uno de los más grandes y largos del mundo. Es el rincón perfecto para disfrutar del skyline de Manhattan.
Puente de las Cadenas en Budapest, Hungría
Custodiado por sus cuatro leones, respaldado por el castillo de buda y acompañado por el Bastión de los Pescadores y el Parlamento consigue, al caer la noche, ser el lugar más bonito y mágico de todo Budapest. Se dice que el escultor de los leones no acababa de estar contento con su obra pero no se daba cuenta de lo que fallaba. Hasta que descubrió que se había olvidado la lengua. No pudiéndose perdonar el error, saltó al agua.
Puente Carlos IV de Praga, República Checa
No hay hora del día en la capital de la República Checa en la que no se pueda disfrutar el particular ambiente -entre histórico y bohemio- de su puente más famoso, el de Carlos IV. Desde el misterioso y silencioso amanecer, entre las más de treinta estatuas barrocas que conforman esta estructura, hasta las tardes bulliciosas en el que los turistas se entremezclan con los transeúntes locales y los artistas callejeros.
Viejos y misteriosos puentes que te trasladarán al Mundo de las Hadas