Mar del Plata, conocida como "la Ciudad Feliz", es elegida por el turismo argentino tanto en verano como en las vacaciones de invierno, porque conjuga el encanto y la belleza de sus recursos naturales, con una muy buena infraestructura hotelera, gran agenda cultural todo el año, y también es de destacar la hospitalidad de su gente.
Con una variada oferta gastronómica, hotelera y de entretenimiento que no descansa en ningún momento del año, Mar del Plata en versión fría agrega a los ya tradicionales paseos otras propuestas que en verano se dejan de lado para sacarle el jugo a la playa.
Así, a las caminatas por la cada vez más linda rambla o la peatonal San Martín, los atracones de rabas y paella en el puerto, y a las compras por la avenida Güemes se le suman muchos paseos no tan tradicionales, pero igualmente atractivos e interesantes.
Además de un mar excepcional, Mar del Plata posee acantilados, médanos y extensas playas de arena que se prestan para disfrutar realizando caminatas, travesías en bicicleta o paseos a caballo.
Desde el aire, se realizan actividades como parapente y saltos de bautismo en paracaídas. Uno de los deportes favoritos de quienes visitan "la Perla del Atlántico" es la pesca deportiva, tanto practicada desde las escolleras de la ciudad como embarcados en las lanchas que parten del famoso puerto.
En el puerto, además de observar sus lobos marinos y la rutina de los hombres del mar que vuelven con su pesca de todos los días, es posible degustar todo tipo de mariscos y pescados en la decena de restaurantes que ofrecen sus servicios
Mar del Plata lo tiene todo. Su vida cultural la asemeja a la ciudad de Buenos Aires. Por la noche, sus pubs, discos, bingos y el famoso Casino de Mar del Plata están preparados para recibir a los clientes más exigentes. Las salas de teatro de la ciudad se colman de público ante la presentación de las obras más destacadas de la temporada.
El Museo del Mar en Mar del Plata
Maravillosos acuarios y una increíble muestra de caracoles hacen del Museo del Mar, un lugar único en la costa atlántica y uno de los pocos en su clase en América Latina.
En la cima de la loma Stella Maris, a sólo 15 minutos de caminata desde el centro de Mar del Plata, se encuentra el Museo del Mar que recrea gran parte de la riqueza del ecosistema marino.
Los creadores de este emprendimiento científico y cultural que enorgullece a la ciudad son sucesores de don Benjamín Sisterna, un coleccionista que por más de 60 años se dedicó a estudiar y recolectar caracoles. A modo de homenaje a su extraordinaria labor y legado, el museo del mar exhibe una increíble muestra de 30.000 caracoles entre otros tesoros marinos.
Sus inmediaciones son también bellas; se puede acceder a lugares como la laguna Sierra de los Padres, las playas de la cercana Chapadmalal o la serrana ciudad de Balcarce.
Mar del Plata es la combinación perfecta para quienes buscan tranquilidad y descanso con la posibilidad de encontrar bullicio y diversión constantes en cada rincón de la ciudad.