Todos los turistas que llegan a Uruguay pueden pagar con tarjeta de crédito accediendo a la devolución del 18% de IVA en gastronomía -sumado a las ventajas que cada tarjeta puede ofrecer-, tienen además descuento de 10,5% en alquileres y 10,5% en alquiler de autos; sumando a esto el sistema Tax Free, que devuelve el 80% del IVA sobre u amplio menú de artículos. Además los peajes se pueden pagar en Pesos Uruguayos, Pesos Argentinos, Reales o Dólares.
Con estas novedades, Uruguay es una opción a tener en cuenta este verano, ya que:
Uruguay tiene varios lugares a los que siempre se quiere volver, uno de ellos son sus hermosas playas
Si estás buscando un destino para pasar unas vacaciones en familia, en pareja, en amigos, o hasta solo/a, te invitamos a descubrir la ruta de las playas más concurridas de Uruguay, y que seguro te tentarán para tirarte en sus arenas.
Con un enclave privilegiado, entre Argentina y Brasil, y de frente al Atlántico, si de algo puede presumir Uruguay es de sus impresionantes playas: son 450 kilómetros de costa a lo largo del Río de la Plata y 200 kilómetros de costa marítima.
Estos más de 600 kilómetros de playa dan lugar a una cadena arenosa de playas de gran interés turístico por la gran belleza que encierran.
Montevideo, la capital uruguaya, posee increíbles playas que se caracterizan por sus finas y blancas arenas y las calmas aguas del Río de la Plata. Junto a ellas 30 kilómetros de rambla constituyen uno de los principales atractivos de la ciudad.
Entre sus playas más concurridas está Pocitos, ubicada a tan solo 15 minutos del Centro de la ciudad. Fue una de las primeras estaciones balnearias de América del Sur. Es hoy una importante zona residencial, con un característico paisaje costero bordeado por un cinturón de edificios altos.
Es ideal para quienes buscan una playa concurrida y es visitada por gente de todas las edades, que caminan por su extensa rambla. En los atardeceres del verano, familias y amigos se reúnen para compartir un mate -clásica infusión de los uruguayos- y conversar sin estar pendientes del reloj.
En Punta del Este se encuentran dos tipos de costas; la denominada Brava -enfrentada al Atlántico-, que goza de la presencia de aquellos que enfrentan al fuerte oleaje, y la conocida Mansa, que es calmada y suave, ideal para quienes gustan del reposo.
Algunas de sus playas más famosas son Portezuelo -en la falda de la sierra de la Ballena- la franja que va desde Los Pinares hasta Las Delicias -con sus gruesas arenas-. Al oeste de Punta del Este, sobre una gran bahía, se despliega la Playa Mansa, una de las más clásicas y concurridas del balneario y que es preferida por las familias. La playa se extiende por varios kilómetros y se subdivide en sectores en torno a los distintos paradores que se establecen a lo largo de la costa.
La famosa Brava es uno de los lugares favoritos en la península para disfrutar del mar esteño. Allí se encuentra la escultura de “Los dedos”, que emergen de la arena. En esa zona la playa es bastante cruda, aunque hay un gran número de bañistas que se arriesgan en el agua salada. Es una playa excelente para practicar surf y perfecto para observar el atardecer y un paisaje mágico.
Finalmente se llega a las playas de la Barra, con su inconfundible doble puente ondulante, y a las de Manantiales.
Si continuas viaje hasta José Ignacio, ubicado a unos 23 kilómetros de La Barra, hay otra infinidad de playas, a cuál más espectacular, algunas pobladas y otras casi vírgenes; pero todas con un atractivo único.
Continuando el viaje por la costa hacia el Norte se llega al departamento de Rocha, dueño de grandes atractivos naturales, formado por extensiones ganaderas, lagunas enmarcadas por palmares, bosques indígenas y una costa enfrentada al Atlántico, que da lugar a diferentes playas oceánicas.
La Paloma, una de sus populares playas, se encuentra al amparo de altos y añosos pinares, abrigada por una amplia ensenada que preserva rasgos encantadores de su primitiva conformación.
Más allá, en Cabo Polonio se visualiza un paisaje desolado, pero hermoso. Arenas, dunas y típicos carritos, sin los cuales es casi imposible llegar a ciertos puntos. Además, esta zona cuenta con la presencia de grandes colonias de lobos marinos, que son uno de los grandes atractivos para el turista. Es usual verlos en las rocas próximas al Faro de Cabo Polonio, y en época de parto las hembras se resguardan con sus crías en las islas cercanas.
Fuente: turismo.gub.uy
