Casi un año después de la muerte de Hugh Hefner, fundador de la revista Playboy, y 32 años después de que se cerraran definitivamente las puertas del Playboy Club de la ciudad de Nueva York, la compañía reabre las puertas en otra ubicación inaugurando de nuevo un lujoso club con el mismo espíritu de "lujo, sensualidad y exclusividad" que tuvieron los más de 30 que existieron en todo Estados Unidos.
En Playboy consideran que ahora hay un renovado "apetito" por esa propuesta
El Playboy Club, según planean sus promotores, estará repleto de "atractivas conejitas de Playboy" y una "estética sexy y sofisticada". Ya se ha realizado una pre inauguración con una fiesta privada, pero abrirá oficialmente sus puertas el 12 de septiembre en 512 West 42nd Street.
Exclusividad y polémica
En un hotel a pocas cuadras de Times Square, el local de más de mil metros cuadrados "será uno de los locales más elegantes y sofisticados del mundo", según informa el portavoz de Playboy Enterprises, John Vlautin.
"El espacio contará con una sala de estar, una sala de juegos y un comedor de servicio completo, pero la característica más atractiva del Playboy Club New York será, sin duda, el regreso de las Playboy Bunnies a Manhattan", reza el comunicado.
"Las seductoras conejitas, anfitrionas, meseras y servidoras de cócteles tienen una reputación mundial y bien merecida por su estilo y elegancia"
Sus trajes fueron confeccionados por el diseñador Roberto Cavalli.
Según informó el New York Post, la membresía más exclusiva asciende los USD 250.000 y en junio ya había vendido "USD 2.2 millones en membresías", el 45% a mujeres.
"No esperábamos tantos miembros antes de que comenzara nuestra comercialización. Necesitamos curar nuestra lista", dijeron sus organizadores.
El club contará con cuatro salas separadas y diferentes niveles de membresía comprarán acceso a diferentes áreas:
- El Rabbit Hole Lounge subterráneo
- El salón Grotto
- El Royal Lounge
- El Black Box, que es donde se llevarán a cabo los eventos, con interiores de primera línea diseñados por el famoso arquitecto Cenk Fikri, nacido en Chipre.
En una ciudad en la que cientos de miles de mujeres salieron a las calles para protestar por la presidencia de Donald Trump, abrir este espacio suena conflictivo.
Repercusiones
La ícono feminista Gloria Steinem, quien se inflitró como conejita en el New York City Playboy Club para un artículo de una revista en 1963, que despotricó contra las condiciones de "explotación" a las que se sometía a las mujeres en ese momento, es una de las que habla mal de este emprendimiento.
"En esta era de #MeToo y #Time's Up sabemos que las trabajadoras de restaurantes están entre las más acosadas sexualmente, porque están exentas de las leyes de salario mínimo y dependen de propinas", dijo al NYT.
"También es doloroso trabajar con corsés semidesnudos y tacones altos". "Al igual que Hefner, los Playboy Clubs son una parodia del patriarcado, al igual que los tipos que los necesitan. Es difícil imaginarse a ningún neoyorquino yendo, fuera de Donald Trump".
Consultadas por el mismo periódico, las ex conejitas Mary Hutton y Kathryn Leigh Scott no piensan igual: "ganaba USD 600 en un turno de almuerzo en 1963", dijo Hutton. "Muchas de nosotras estábamos ganando más que nuestros novios, hermanos o incluso nuestros padres, y teníamos 18 años, íbamos a la escuela y lanzábamos carreras ", dijo al Times. "Y fue divertido".
Fuente: Infobae