A tan solo una hora de Santiago de Chile se encuentra el Cajón del Maipo, un destino frecuente para los fanáticos del ecoturismo y practicantes de senderismo, cabalgatas, ciclismo de montaña y kayak.
Lleno de vida, sol y naturaleza, este lugar también es ideal para hacer una escapada romántica o familiar durante un fin de semana. Buena Vibra tuvo la oportunidad de pasar allí unos días y armamos esta guía en la que te contamos dónde hospedarse y qué hacer en el Cajón del Maipo.
Hotel La casa de Carlitos
Al llegar al Cajón nos recibe la calma y la calidez que estábamos deseando. Pero la cosa se pone aún mejor cuando llegamos al hotel La casa de Carlitos. Este formidable centro de alojamiento está a una hora y media de la ciudad de Santiago. Queda en El Manzano, una de las principales localidades de la zona junto a San José.
Lo elegimos porque notamos que su ubicación es excelente ya que está a 200 metros de la calle principal, Camino el Volcán, y al mismo tiempo porque estando allí se puede disfrutar del silencio y hermosos paisajes.
La casa de Carlitos cuenta con algunas cabañas grandes y con aproximadamente unas 20 habitaciones en total. En la habitación donde nos alojamos, por ejemplo, entraban cómodamente tres personas y contaba con una cama matrimonial y otra individual, un baño súper espacioso, una heladerita pequeña, un Smart TV y un escritorio grande con una silla. Eso era todo lo que necesitábamos para un fin de semana de desconexión de la ciudad y conexión con la naturaleza.
La cabaña central, además de tener habitaciones a los lados, tiene tres pisos llenos de espacios comunes. Hay una mesa de pool y en cada piso hay varios sillones con mesas para que las personas se sienten a compartir, charlar y quizás jugar juegos de mesa.
En el exterior el hotel dispone dos piletas (una de ellas climatizada y la otra con agua a temperatura ambiente), y algo más que despertó nuestra sorpresa cuando lo vimos: dos inmensas tinajas con agua climatizada para relajarse y disfrutar del inmenso espacio verde que nos rodea y de los despejados cielos del día o los increíblemente estrellados cielos de la noche.
El lugar, de más está decirlo pero vale recordarlo, es súper silencioso y lo más destacable es que todas las personas allí están en un plan similar: conectarse con la naturaleza para reforzar la conexión con uno mismo.
La atención
Llegamos el viernes a las 21hs y desde el primer momento fueron súper atentos con nosotros dos. Nos estaban esperando con una tinaja caliente para deshacernos del estrés de la ciudad y comenzar a disfrutar del Cajón. Estuvimos media hora allí y luego nos fuimos a la habitación a comer una picada que trajimos de Santiago.
A la mañana el día comenzó muy tranquilo para nosotros. Nos despertamos a las 10 de la mañana y fuimos a desayunar. El día anterior nos dieron la opción de elegir entre desayunar en la habitación o en el comedor y preferimos el comedor para tener la vista de los cerros. El desayuno fue muy completo, tenía huevo revuelto con tostadas, jugo de naranja, café o té, un bowl con frutas frescas, una porción de torta Selva Negra y una porción de budín.
Luego del desayuno nos dieron un tour por todo el hotel y nos contaron que durante la pandemia fue residencia sanitaria, por lo que estaban más que preparados y familiarizados con los protocolos COVID.
La casa de Carlitos no paró de sorprendernos, nos encontramos con un ambiente súper especial y relajante y las personas que trabajan ahí fueron muy detallistas con nosotros.
La ubicación
El hotel queda sobre un camino pavimentado y justo en la esquina con la avenida principal hay una pizzería. Nos habían recomendado ese lugar por sus cervezas artesanales pero cuando llegamos nos dijeron que no vendían bebidas alcohólicas, por lo que preferimos ir a otro lugar para no quedarnos con las ganas.
Aproximadamente a 400 metros, sobre la avenida principal hay un pequeño boulevard con varios restaurantes: uno de sushi, otro de comida venezolana, de comida chilena, pizzas, etc. Comimos en una cafetería que también tenía pizzas llamado Aroma Canela. Las pizzas eran muy ricas, tienen una base de queso y salsa de tomate y se pueden elegir hasta 4 ingredientes para agregarle.
Cuando vayan al Cajón del Maipo una opción 100% recomendable es la de hospedarse en La Casa de Carlitos.
Qué hacer en el Cajón del Maipo
Sábado: Embalse el Yeso
Después del recorrido por el hotel, a eso de las 13hs tomamos el auto para dirigirnos hacia el Embalse el Yeso. Este es uno de los principales puntos turísticos del Cajón del Maipo y por nada del mundo nos lo perderíamos. Desde el hotel tardamos una hora y media en llegar. Si bien no quedaba muy lejos, el camino tenía muchas subidas, bajadas y sectores donde solo podía pasar un auto a la vez. Nos sorprendió el cuidado de las calles y no nos pareció complicado el recorrido.
Cuando nos faltaban unos pocos kilómetros para llegar, nos enteramos de que no se puede pasar en auto hasta el embalse; que hay que dejarlo en un descampado y a partir de ahí, caminar. El hombre que cuidaba los autos nos dijo que era media hora de camino pero nosotros estuvimos una hora y todavía no llegábamos al final. Eso sí: las vistas eran extraordinarias.
Nosotros no estábamos preparados para caminar tanto y a mitad de camino nos dio hambre. Por lo que luego de varias fotos y mucha caminata decidimos volver. Les recomiendo que si van, tengan contemplado que hay que caminar bastante, con frío y no hay lugares que vendan comida además de un quiosco al inicio del camino que vende panchos, gaseosas y café.
Volvimos al hotel como a las 18hs, dejamos el auto y fuimos a “almorzar” a Aroma Canela. Fue un día agotador pero disfrutamos mucho.
Domingo
El checkout del hotel era a las 12 y nosotros nos fuimos a esa hora después de desayunar y hacer nuestros bolsos. Teníamos ganas de conocer un lugar que se llama Las Cascadas de las Ánimas, que queda a 30 minutos del hotel. Pensábamos que se podía llegar a las cascadas en auto pero al llegar nos dijeron que solo se puede llegar caminando o a caballo.
En esta ocasión tampoco estábamos preparados para caminar, no teníamos la ropa adecuada, teníamos el auto lleno de bolsos y comida y queríamos volver a Santiago temprano para evitar el tráfico de las personas volviendo a la ciudad. No pudimos ver las cascadas pero nos quedamos con muchas ganas. Por esta razón, cuando vayas al cajón del Maipo, será importante que sumes ropa deportiva a tu equipaje y que salgas con bastante tiempo para aprovechar todas las atracciones de la zona.
Cerca de las Cascadas de las Ánimas hay otro punto turístico muy importante: La casa de Chocolate. Es una casa muy linda que hoy en día funciona como tienda, venden helados, galletitas, chocolate caliente, alfajores, barras de chocolate y más. Allí disfruté de un chocolate caliente y de otro rato de sol en un ambiente amigable y sereno.
En la casa de chocolate tuvimos la suerte de encontrarnos con Pangal Andrade, el deportista extremo famoso por ganar un reality show chileno. Él vive en el Cajón del Maipo, tiene varios hoteles y también es dueño de la Casa de Chocolate. Es súper amable, nos dejó sacarnos una foto con él y justo lo encontramos grabando un video para la casa.
Después de la Casa de Chocolate regresamos a Santiago, no había nada de tráfico y Waze nos indicó ir por una calle alternativa, donde disfrutamos de hermosos paisajes y vistas directas al río. Si tienen la oportunidad de ir les recomiendo tomar esa ruta. Además, si quieren pueden almorzar por la zona de la casa de chocolate, hay varias opciones.
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