A 7 km de San Javier, hacia Yacanto, en Córdoba, Argentina, subiendo a la montaña hasta los 1.400 metros se llega a La Constancia, estancia histórica de Traslasierra, de 1.200 hectáreas de bosque serrano.
El casco, ubicado en el punto más alto de la montaña, en plena Quebrada del Tigre, fue construido en 1895 por José María Arias Moreno, quien buscaba aliviar la tuberculosis con el aire de la sierras.
Primero fue una habitación de paredes de adobe y techos de paja; luego tuvo palomar, patio de juegos infantiles, una gran pileta de natación y hasta una “playa de las Adoratrices”, donde recibían a las hermanas de esa orden, que vivían en San Javier.
Luego de 40 años de abandono, el casco de piedra, adobe y madera de La Constancia fue restaurado y reabrió sus puertas en el año 2000, como una estancia serrana de carácter singular.
Ofrece un entorno único con un parque natural conformado por cientos de árboles enormes y añosos. Cuenta con 9 habitaciones en suite (sin TV), sala de juegos (con TV) y una capilla construida en 1935.
Además ofrecen sesiones de reiki y belleza. No reciben menores de 12 años.
Agustín Dorado, a cargo de la estancia, informa:
“Este es un campo familiar y la idea es que la gente se relaje y se sienta como en su casa. Después, el lugar hace su parte”
Desde aquí se puede hacer trekking por senderos autoguiados, ascender al Champaquí, pescar truchas en el arroyo, o simplemente recolectar hongos de pino para comerlos en el almuerzo.
Para llegar a La Constancia lo mejor es hacerlo en camioneta o en auto con cierta altura; las lluvias barren el camino y el ascenso se puede complicar. Vale la pena trepar los 7 km y encontrarse con este sitio alucinante atravesado por el cristalino arroyo San Javier.
La Constancia
Quebrada del Tigre.
[email protected] / www.estancialaconstancia.com