El otoño es una estación especial para descubrir las maravillas naturales de Esquel y sus alrededores. Innumerables senderos y excursiones lacustres a través de lagos, ríos y montañas alimentan y renuevan el espíritu aventurero de quienes llegan a este rincón de la Patagonia, en busca de paz y de tranquilidad.
La ciudad está enclavada en una depresión de los cerros que la rodean a 550 metros sobre el nivel del mar, y los faldeos le confieren un aspecto de anfiteatro
Podés leer: La Hoya: la nueva vedette del ski en la Patagonia
En torno a ella, se elevan el cerro Nahuel Pan (2240 msnm) y el Cordón Esquel (2145 msnm), en el que se destacan el cerro homónimo, y el Cerro La Hoya (2100 msnm) donde se encuentra el centro de esquí de la ciudad.
Provista de un entorno natural de gran atractivo, Esquel es hoy la ciudad de servicios más importante situada junto al Parque Nacional Los Alerces.
Sendero de Pinturas Rupestres
Para aquellos que desean una aventura corta pero intensa, una alternativa es recorrer el sendero de Pinturas Rupestres. Ubicado en el Parque Nacional Los Alerces, se puede observar y disfrutar de un alero con pinturas prehistóricas de antiguas poblaciones, para luego realizar un ascenso de diez minutos hasta un espectacular mirador. Tiene una duración de 40 minutos y es de baja dificultad.
Autenticidad y frescura
Otras opciones interesantes para los visitantes son las expediciones hacia el lago Krüger, al Alerzal Milenario o una caminata a través del sendero del arroyo de Cascadas.
En cada uno de estos trayectos, la inmensidad de la naturaleza intimida por su belleza, pero a la vez, llena de regocijo por su autenticidad y frescura
Por último, en Esquel, los senderos Las Mutisias, Don Celso (en el cerro La Hoya), Los Corrales y Laguna la Zeta, son otros de los paseos que pueden realizarse durante la temporada.
A sólo pocos minutos de la ciudad, tendrás la posibilidad de contemplar vistas panorámicas extraordinarias, disfrutando de los inigualables colores que la vegetación ofrece en esta época del año
Podés leer: Viaje a la Patagonia: paraísos para descubrir
Huella Andina: la senda de la memoria
Esta ruta, quizás la más importante de la región, recorre los paisajes más impactantes de la Provincia de Chubut.
Une el Lago Aluminé de Neuquén pasando por Río Negro hasta el Lago Baguilt a 50 kilómetros de Esquel, cruzando de norte a sur la zona cordillerana de la Patagonia Norte. Se atraviesan parques nacionales y áreas protegidas provinciales utilizando huellas y senderos que, una vez finalizado el proyecto, totalizarán unos 560 kilómetros.
El tramo sur de la Huella es una de las últimas etapas del recorrido y se realiza en la Comarca de Los Alerces.