Cuando llegás a una ciudad por primera vez, si no estás muy informado, podés ser presa de estafadores. Para que estés alerta, te contamos algunas cosas que le han pasado a algunos blogueros viajeros.
Mirá los trucos que suelen usar para engañar a turistas:
Conductor servicial: un auto se acerca al tuyo y el conductor gesticula agitadamente además de hacer señas de luces: el bloguero Robin Runck vivió esta escena en Francia.
“Creíamos que teníamos algún daño en el coche y estuvimos a punto de pararnos”. 
Pero este experimentado viajero conocía el truco y advierte: “Si te paras, rápidamente te roban las cosas de valor de tu coche”
No pares si otro conductor te hace señas hasta no llegar a una estación de servicio y también ten cuidado con los accidentes posiblemente escenificados.
Taxista deshonesto: te ofrecen un taxi por 20 euros para ir directamente del aeropuerto al hotel en la ciudad. Parece muy buen precio, pero y si el viaje en realidad solo cuesta diez euros?
Muchas veces, una tarifa fija parece ser a primera vista más económica que el precio que marque el taxímetro. Sin embargo, son justamente los precios fijos los que permiten al taxista engañar a los turistas. “Muchas veces, cuando el taxista te ofrece una tarifa fija, te está cobrando el doble”, dice Johannes Klaus.
Si vas a tomar taxi, elegí en el aeropuerto un taxi de una empresa registrada. En la ciudad conviene llamar el taxi desde el hotel o el restaurante.
El truco del templo: en muchos lugares turísticos populares, especialmente en el sureste asiático, se te acercarán personas con tarjeta de guías yen realidad no lo son. Ofrecen una excursión al siguiente templo a un precio muy bajo. Pero una vez en marcha verás que el destino de la excursión no es el templo, sino que el presunto guía lleva a los turistas al comercio de un amigo para que compren ahí joyas, alfombras y souvenirs.
“Te presionan mucho y hay que tener experiencia para poder defenderse”, dice el bloguero Johannes Klaus, que gestiona la plataforma turística Travel Episodes.
Por lo tanto no te dejes convencer por un guía de la calle.
Estafa con la tarjeta de crédito: si el vendedor en un comercio desaparece de tu vista con tu tarjeta de crédito, exigí inmediatamente la devolución de la tarjeta, porque en esos casos a veces sacan rápidamente una copia de tu tarjeta. “En mi tarjeta de crédito me cargaron alguna vez importes desde Vietnam”, relata Klaus.
No pierdas de vista la tarjeta de crédito y guardá todos los recibos. Por ejemplo, Klaus pudo demostrar que cuando se cargaron los importes falsamente en su tarjeta de crédito no estaba en Vietnam sino en Tailandia. “El seguro asociado a mi tarjeta de crédito me reembolsó el dinero”.
Robo del bolso de mano: un fenómeno que se da en todo el mundo. Muchas veces, los ladrones actúan en grupos y están bien organizados. Se te acercan en la calle y te ofrecen su ayuda, distrayendo tu atención mientras un tercero te quita el bolso.
Un truco clásico es este: un hombre se te acerca y hace como si se tropezara, se agacha y queda parado. Mientras la víctima acude a ayudarle y se distrae, un cómplice agarra el bolso.
Viajá libre, feliz y alerta. Buen viaje.
