Cuando viajamos, ya sea solos, en familia, en pareja o con amigos, surgen momentos que queremos capturar con una excelente foto, que no siempre se logra con una selfie.
Cómo lograr que un desconocido nos saque una buena foto
- Buscar a alguien que esté en la misma situación: ves a alguien sacándole foto al amigo y te das cuenta que no busca un buen encuadre. Te ofrecés a tomarles una foto juntos. Componés la imagen, disparás y luego al compartir la captura decís: “miren, aquí están, logré tomar el árbol, y que no haya sombras raras en sus caras y se ve perfecta la pirámide en el fondo”. Cuando te agradecen les decís: “¿podrían ustedes tomarme una foto exactamente igual?”
- Sin vergüenza interrumpí al fotógrafo profesional y pedile que te saque. Los distinguís por sus cámaras que parecen cañones. A veces cargan trípodes y es posible que te digan que están muy ocupados, que “se les pasa la hora dorada”. Otros, aceptarán con simpatía y lograrán la mejor foto que puedan tomar con tu cámara. Siempre preguntales. No tenés nada que perder.
- Usá tu intuición para hallar a una persona detallista y paciente. Mirá a tu alrededor: ¿qué hacen las personas que te rodean? Si están en apuros o cargando muchas cosas, difícilmente puedan darse el tiempo para retratarte. Tratá de adivinar quién será paciente para entender lo que querés. Puede ser un interesantísimo ejercicio para que reflexiones sobre tu capacidad de leer a la gente, así como sobre tus prejuicios. Quizás esa persona mayor resulte mucho mejor fotógrafa que el extranjero que carga con tecnología último modelo.
- Practicá el pedir exactamente lo que querés y sus consecuencias. “Quiero que salga el cuerpo completo”, “quiero que se me vea a la izquierda del encuadre”, “quiero que la imagen capture desde esta palmera hasta el muelle”. Practicá pensar y comunicar exactamente qué buscas. Verás que solo hay que animarse.
Es probable que debas ejercitar tu actitud frente a quien termina haciendo lo que se le da la gana, más allá de tus claras directivas. Entonces, en cada situación, deberás decidir si cuando te pregunta “te gusta, está bien”, le responderás “no, por favor tomá otra y esta vez incluí la palmera”, o simplemente no decís nada y listo.
Tomalo con humor y las respuestas que obtengas consideralas una anécdota más del viaje.
Para simplificar, si tus imágenes son para redes como Facebook o Instagram, configurá tu cámara para que saque fotos cuadradas. De esa manera, obligarás a tu completo desconocido a incluir en un cuadrado todo lo que querés que salga.
Buena suerte y buen viaje.