Quienes amen las caminatas vigorizantes en plena naturaleza, o andar en bicicleta por senderos silvestres pueden encontrar la experiencia definitiva que los pondrá cara a cara con el desafío que estaban buscando.
Con 21.500 ya en funcionamiento de los 24.000 kilómetros pautados el sendero recreativo más largo del mundo, The Great Trail, el Gran Sendero de Canadá, ofrece una amplia gama de actividades a través de una variedad de paisajes - urbano, rural y salvaje, a lo largo de vías verdes, vías fluviales y carreteras.
Fiel a su nombre, el gran camino encarna la inmensidad del territorio canadiense y la diversidad del pueblo de ese país norteamericano.
El sendero, el más largo del mundo, atraviesa el 87% del territorio canadiense, y puede recorrerse caminando, en auto o en bicicleta. Y en varios tramos, casi una cuarta parte del total, también en bote o kayak.
Este camino de recreo conecta todo el país y a sus habitantes en un sentido literal, ya que el 80% de los canadienses (cuatro de cada cinco) viven a menos de 30 minutos de alguno de los puntos de entrada, informan en la web de The Great Trail.
El último tramo se inaugurará en junio, para conmemorar el 150 aniversario del nacimiento del gigantesco país americano.
Desde ya que los paisajes por los que este camino va pasando son de lo más variado y ponen de relieve la inmensa diversidad geográfica y cultural canadiense: desde llanuras que parecen infinitas hasta montañas de más de 4.000 metros de altura, lagos glaciares, islas y tundras de permafrost que son los únicos donde se permiten circular vehículos de nieve a motor.
Pero además de permitir descubrir esta enorme variedad, The Great Trail ayuda a la conservación medioambiental, y sus funciones sociales no acaban aquí ya que por otro lado promueve estilos de vida activos y a su vez crea puestos de trabajo relacionados con el turismo a lo largo de todo el recorrido.
La idea de conectar la costa del Pacífico, con la del Atlántico atravesando pequeños poblados de indígenas inuit y grandes metrópolis como Toronto, Winnipeg, Ottawa o Montreal mediante esta ruta resulta es muy atractiva para los amantes de la aventura. La iniciativa surgió en 1992 a partir de Trans Canada Trail, una ONG que a través de una serie de donaciones públicas comenzó su tarea reacondicionando caminos, instalando pasarelas de seguridad y levantando puentes de madera para superar riachos y marismas.
Quienes deseen hacer todo el recorrido deben iniciar su marcha en el Museo del Ferrocarril, en la isla de Terranova, en el extremo este del país. Para recorrerlo en su totalidad cuando esté finalizado, deberán calcular unos 900 a 1.000 días de caminata si es que lo van a hacer a pie.