Óbidos es una encantadora villa medieval amurallada, situada a tan sólo una hora desde Lisboa. Visitarla es fácil y es una excursión fantástica desde la capital lusa, no sólo por su cercanía, sino por los preciosos rincones que regala durante la visita.
Óbidos era conocida como la “Vila Das Rainhas” (“villa de las reinas”), ya que desde el siglo XIII esta aldea era ofrecida por los monarcas portugueses a sus esposas a modo de regalo de boda. Esta tradición comenzó con el rey Don Dinis y perduró hasta comienzos del siglo XIX, cuando la villa dejó definitivamente de ser patrimonio de la Casa de la Reina.
Cómo llegar a Óbidos desde Lisboa
- Auto: Óbidos se encuentra a 82 km. de Lisboa, y el mejor camino y más rápida para llegar es tomar la A-8 hasta la salida 15
- Óbidos está muy bien conectada con Lisboa, por lo que encontrarás autobuses de la compañía Rodotejo.pt que salen cada 15 o 30 minutos desde varias puntos de la ciudad, como Campo Grande o la Estación del Este hacía Óbidos, y el billete cuesta entre 8€ y 9€
- Taxi: el precio ronda los 150€
- Tren: no es recomendable porque la estación se encuentra muy lejos del casco histórico.
Qué ver en Óbidos
El pequeño municipio de Óbidos, con apenas 3.000 habitantes, ha sido declarado Patrimonio Nacional por su atractivo medieval, sus calles adoquinadas, las casas encaladas de blanco, y los robustos muros que le protegen, además de la impronta de todas las civilizaciones que han pasado por aquí, árabes, romanos, celtas, etc.
Porta da Vila
Esta puerta de doble acceso, fue colocada aquí en el año 1.640, con un balcón revestido posteriormente de azulejos blancos y azules, y en el interior, el Santuario de Nuestra Señora de la Piedad, patrona de la villa.
Murallas de Óbidos
Desde allí mismo, hay unas escaleras por las que podrás subir a la muralla del siglo XIV, que ofrece unas preciosas vistas panorámicas. Podrás rodear la ciudad al completo en un recorrido de 1,5 km. aproximadamente, con una duración de al menos 2 horas.
Rua Dereita
Si en lugar de subir a la muralla desde la Porta da Vila, decidís atravesar la muralla y acceder al interior, llegarás a la calle principal de la ciudad, con preciosas casas convertidas en tiendas de souvenir, artesanía y locales que sirven la riquísima ginja (licor de guindas) servida en vasos de chocolate.
Castillo de Óbidos
El Castillo de Óbidos, construido en el siglo XII, impresiona en lo alto de la colina, con muros de más de 13 metros de alto, además de tener el título de una de las Siete Maravillas de Portugal.
En la actualidad funciona como hotel, La Pousada de Castelo, un lugar espectacular para una escapada romántica, aunque no para todos los presupuestos. Si no te vas a alojar allí, te recomiendo visitar los jardines y tomar algo en la cafetería.
Iglesia de Santa María en Óbidos
La Iglesia de Santa María es la principal en la villa de Óbidos, se cree fue edificada en el siglo XII, aunque su situación fuera de las murallas lo contradiga, y ha sido restaurada en multitud de ocasiones resultando un estilo renacentista.
La iglesia se hizo famosa por celebrarse aquí, en 1.444, el matrimonio del rey Alfonso V, de tan sólo 10 años, e Isabel de 8 años.
El interior profusamente decorado, lleno de azulejos pintados, contrasta con su sencillo exterior.
Picota de Óbidos
Frente a la iglesia, en la plaza de Santa María, hay una picota de piedra o pelourinho, donde se ajusticiaba desde 1.492 a los criminales que eran atados aquí, para que la multitud les tirase piedras.
Fue un regalo de la reina Leonor en agradecimiento a los pescadores de la localidad, que recuperaron el cuerpo de su hijo Alfonso, que murió mientras paseaba con su caballo a orillas del río.
Acueducto de Óbidos
El acueducto de Usseira o de Óbidos, con 3 km. de longitud, fue mandado construir por la reina Catalina de Austria en 1.570, que vendió sus tierras en las afueras del municipio, para poder traer agua al mismo. Su estado de conservación es muy bueno.
Laguna de Óbidos
La laguna de Óbidos, el lago salado más grande de Portugal, es una zona tranquila y paradisíaca, a tan sólo 17 km. de Óbidos, donde el lago se une con el Atlántico. Es un lugar excepcional para practicar windsurf, kitesurf y todo tipo de actividades acuáticas.
Comer bien en Óbidos
No dejes de disfrutar la gastronomía portuguesa y sus platos típicos más ricos, en Óbidos, y en cualquier lugar que visites.
Cafe Snack Bar
Dirección: Largo Do Santuario Do Senhor Da Pedra
Precio: económico
Comida casera, abundante y muy sabrosa. La especialidad son los platos de pescado, aunque también tienen buenas carnes, como el secreto ibérico.
Vila Infanta
Dirección: Largo Do Santuario Do Senhor Da Pedra
Precio: económico
En este restaurante destacan la calidad de sus carnes y su comida tradicional portuguesa, muy bien preparada. Si no sabés qué pedir, probá el bacalao con nata (podés pedir solo media ración, porque es un plato muy abundante).
Óbidos se puede visitar en sólo unas horas, pero es un lugar imprescindible que visitar en Portugal.
Fuente: www.estaentumundo.com