
Viajar a los Balcanes es descubrir paisajes sorprendentes, ciudades con historia y rincones que todavía conservan un aire auténtico. En medio de esta región se encuentra Kotor, una joya de Montenegro que cada vez atrae a más viajeros, pero que aún conserva el encanto de ser un destino poco masificado. Situada en la espectacular Bahía de Kotor, considerada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, esta ciudad amurallada es ideal para quienes buscan una mezcla de cultura, historia, naturaleza y mar.

Si estás planeando un viaje o harás una escala de crucero, aquí te contamos qué hacer en Kotor, el secreto mejor guardado de Montenegro.
Kotor, el secreto mejor guardado de Montenegro
Kotor es una de las ciudades de la costa de Montenegro, un pequeño poblado de enorme belleza escénica y potencial turístico. Su valor patrimonial le ha valido para ser declarada como Patrimonio de la Humanidad: rodeada de murallas al pie de montañas, y en una bahía muy cerrada (que la hace parecer un fiordo entre acantilados elevados), esta pequeña localidad tiene todas las condiciones para ser un hito turístico de la costa Dálmata.

Pequeño y accesible, el casco antiguo de Kotor es un laberinto de callejuelas empedradas, placitas tranquilas y esbeltos edificios centenarios. Un escenario de cuento en el que no faltan deliciosos cafetines y exclusivas tiendas de artesanía y moda.
En toda el área, es posible el turismo de sol y playa, o el senderismo con magníficas vistas desde las montañas del entorno. Las playas vecinas la convierten en un destino ideal en el Mediterráneo.
Qué puedes hacer en Kotor en una parada de crucero
La división de la extinta Yugoslavia dejó un poco en el olvido enclaves como Kotor, uno de los paraísos de la bella trilogía de la costa dálmata, junto a Split y Duvroknik.
Hoy, la bahía de Boka Kotorska, resurge de sus cenizas mostrando en todo su esplendor su riquísimo legado histórico y arquitectónico, amén de una natural hospitalidad.
El entorno natural de este lugar del viejo continente, es conocido como “el fiordo más meridional de Europa”. Pero no es un fiordo, ni estamos en Noruega.

La razón por la que la bahía no es un fiordo es simple: la larga bahía de Kotor, o Bocas de Kotor, también conocido como el fiordo de Kotor, ha sido esculpida por el río Bokelj en su encuentro con el Adriático. Es lo más parecido a un fiordo gracias a las altas paredes montañosas que se alzan a ambos lados de la larga bahía.
Por ese cañón sumergido del desaparecido río Bokelj navegan los barcos antes de llegar a Kotor. Sin duda es una de las estampas más bonitas que recordarás de tu viaje.
Cosas para hacer en Kotor
- Recorrer el casco antiguo de Kotor
El casco antiguo es el corazón de la ciudad y el lugar que mejor refleja su historia medieval. Sus calles empedradas, plazas escondidas e iglesias centenarias invitan a caminar sin prisa. Entre los puntos destacados están la Catedral de San Trifón, el Museo Marítimo y las murallas que rodean la ciudad, construidas para protegerla de invasores durante siglos.

- Subir a la Fortaleza de San Juan
Uno de los grandes imperdibles de Kotor es la Fortaleza de San Juan (San Giovanni). Aunque la subida puede ser exigente —más de 1.300 escalones— la recompensa son las mejores vistas panorámicas de la bahía. Lo ideal es hacer la caminata temprano por la mañana o al atardecer para evitar el calor y disfrutar de un paisaje inolvidable.
- Pasear por la Bahía de Kotor
La bahía, conocida como el “fiordo más meridional de Europa”, ofrece paisajes espectaculares en cada curva. Puedes recorrerla en auto, bicicleta o, mejor aún, en un tour en barco. Desde allí tendrás vistas únicas de los pueblos costeros y de islotes como Nuestra Señora de las Rocas, un santuario construido sobre una isla artificial.
- Descubrir Perast y sus islas
A pocos kilómetros de Kotor se encuentra Perast, un encantador pueblo barroco que parece detenido en el tiempo. Desde allí parten botes hacia Nuestra Señora de las Rocas y la Isla de San Jorge, dos puntos icónicos que no pueden faltar en tu visita. Es un plan perfecto para una excursión de medio día.
- Disfrutar de la gastronomía local
Montenegro sorprende con sabores mediterráneos mezclados con influencias balcánicas. En Kotor podrás probar platos a base de pescado fresco, mariscos, quesos artesanales y el famoso prsut, un jamón ahumado típico de la región. Comer en una terraza dentro de las murallas es parte de la experiencia.
- Vivir Kotor desde un crucero
Kotor es también uno de los destinos más populares en los itinerarios de cruceros por el Adriático. La llegada en barco es espectacular: navegar entre montañas hasta atracar frente a la ciudad amurallada es una experiencia que queda grabada en la memoria. Si solo tienes unas horas, lo mejor es concentrarte en el casco antiguo y la subida a la fortaleza.
Llegando a Kotor en crucero: qué ver en una escala de horas
Los barcos fondean en la bahía y se realiza el desembarco en tenders (embarcaciones más pequeñas) hasta el muelle. Ese día tratá de madrugar para ver cómo el crucero llega a Kotor a través de esa impresionante entrada de agua, mientras escuchás las campanas de las torres de las iglesias en la orilla por las que va pasando. Una costumbre que tienen cada vez que se aproxima un barco de crucero.

Muralla y sus puertas
Lo primero que verás a tu llegada a Kotor serán sus murallas. Con sus 3 puertas de entrada, una en el centro y dos a los extremos atrapará toda tu atención. Las murallas conservan la totalidad de los elementos medievales, torres, puentes levadizos, fosos…
Se accede a través de la puerta principal de la muralla, la Puerta al Mar, y será tu primer contacto con el centro histórico de Kotor. Se abre a su izquierda con majestuosos edificios:
- Palacio Ducal de estilo veneciano.
- Arsenal construido para preparar a los soldados para que protegieran la ciudad ante ataques enemigos.
- Torre del Reloj construida en 1602, cuyo mantenimiento es realizado por la misma familia de relojeros desde su construcción. Como curiosidad sólo se ha parado una vez y fue durante el terremoto de 1979.
- Catedral. Justo al salir de la Plaza de Armas, encontrarás la majestuosa catedral, construida en el siglo IX sobre un antiguo templo. Sus decoraciones son de estilo barroco y sin duda es conocida por el gran tesoro que se haya dentro de ella.
Este tesoro incluye cruces, espadas, objetos de oro y plata. El altar mayor reúne escenas de la vida San Tripun, en cuyo honor se celebran las mayores fiesta de Kotor.

Iglesias
Uno de los mayores patrimonios históricos de Kotor son sus iglesias, donde podrás observa el gran fervor religioso que siempre ha rodeado a sus habitantes.
Entre la gran cantidad de iglesias se destacan las siguientes:
- San Lucas (Sveti Luka), del siglo XIII
- La Iglesia de Santa María (Sveta Marija, s. XIII)
- La Iglesia de Santa Ana (Sveta Ana. s. XII)
- La iglesia de San Nicolas.
Castillo de St Iovan
Conocido por los locales como San Djovani, es necesaria de una ascensión empinada y bastante intensa aunque no muy larga para llegar a él. El camino tiene peldaños en la mayor parte del recorrido aunque no son de una dificultad elevada. En mitad del recorrido nos encontramos con la iglesia Gospe os Zdravlja.
Se puede acceder desde dos puntos de la ciudad, donde se encuentra las casetillas donde haremos el pago para poder tener acceso a la subida. Aunque nos parezca una odisea desde abajo, las vistas de la ciudad y su bahía merecen la pena. Al final del recorrido nos encontraremos con nuestra meta el castillo de St.Jovan.
Tips
- Justo a la salida del muelle estña la oficina de turismo donde podrás adquirir de forma gratuita el mapa de la ciudad, y los horarios de apertura de las diferentes iglesias y museos de Kotor.
- El tráfico en el puerto puede ser elevado, cuidado cruzando la carretera.
- Atento a las rocas sueltas cuando camines por las murallas de la ciudad y subas hasta la Fortaleza de San Ivan. Si decidís hacer esto, usa zapatos resistentes.
- Caminar es la mejor manera de moverse por la Ciudad Vieja de Kotor, que es bastante pequeña, compacta y sin automóviles. Y a medida que las calles se hacen más estrechas, las tiendas se vuelven más interesantes.
- Los taxistas locales suelen esperar la llegada de los barcos ofreciendo excursiones que suelen rondar 60 euros por hora para un automóvil con hasta cuatro pasajeros. No tengas miedo de negociar.
Conclusión: un destino que lo tiene todo
Kotor es, sin duda, el secreto mejor guardado de Montenegro. Con su mezcla de historia, naturaleza y cultura, ofrece actividades para todo tipo de viajeros: desde quienes buscan perderse en sus calles medievales hasta los que disfrutan de la aventura en las montañas o la calma frente al mar.
Ya sea como parte de un viaje por los Balcanes o en una escala de crucero, Kotor te dejará con ganas de volver. Es uno de esos lugares que todavía conserva autenticidad y que, al visitarlo, se convierte en un recuerdo inolvidable.
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