Vegano y natural: restaurante nudista con lista de espera

Los camareros atienden a los clientes vestidos únicamente con taparrabos o prendas mínimas, y los comensales pueden elegir cuánto desnudarse, aunque la desnudez total es opcional.

Actualizado: 4 de junio de 2025

The Bunyadi es conocido como el primer resto nudista de Londres, inaugurado en junio de 2016. El concepto fue ideado por Sebastian, quien buscaba romper las barreras entre las personas y la comida, promoviendo una experiencia de “comida desnuda” tanto en lo físico como en lo culinario.

La propuesta incluye un menú de comida cruda, con opciones tanto veganas como de carne, y un ambiente donde se prohíbe el uso de tecnología, como teléfonos y relojes, para crear una experiencia atemporal y desconectada del mundo exterior

Es inédito en Gran Bretaña. El Bunyadi es el primero en ofrecer a su clientela la posibilidad de disfrutar de una comida totalmente natural para un cliente despojado de todo aquello que resulte accesorio: va tan a fondo en su propuesta de vivir acorde a la naturaleza que permite sentarse en sus mesas sin ropa, totalmente desnudos.

El nombre bunyadi significa, precisamente, "natural". El dueño invita a experimentar una verdadera liberación

nudismo

Desde que lo anunciaron, el resto sumó una lista de espera de 46 mil personas en lista de espera, todas dispuestas a probar este nuevo y arriesgado concepto y disfrutar de las dos opciones de cocina: vegetariana y un menú degustación no vegana, que cuesta entre 70 y 85 euros.

Los clientes pueden disfrutar de comidas a la parrilla de leña servidas en una vajilla de barro hecha a mano y cubiertos comestibles, en un espacio ajeno al mundo industrializado.

Los comensales pueden disfrutar de una cena bajo la luz de las velas, en habitáculos divididos los unos de otros con bambú y mimbre, y muebles de madera tallada.

Bunyadi

Seb Lyall, el fundador de este novedoso concepto, asegura que "la gente debe tener la oportunidad de disfrutar de la experiencia de una noche sin ningún tipo de impurezas: sin productos químicos, colorantes artificiales, ni electricidad, ni gas, ni teléfono e incluso sin ropa si así lo desean. La idea es experimentar la verdadera liberación", concluye el cerebro de la idea.

El lugar, ubicado en el centro de Londres, está dividido en dos secciones, una para clientes vestidos y otras para aquellos que quieren comer sin ropa.