La Gran Vía de Madrid, con sus 1.300 metros de longitud y más de 100 años de historia, es un auténtico centro comercial al aire libre que acoge algunas de las tiendas más solicitadas de la ciudad. Un auténtico centro comercial al aire libre que cada año atrae a más de 10 millones de personas.
La Gran Vía de Madrid
La Gran Vía arranca en la calle Alcalá y desde allí se desliza hasta la Plaza de España a lo largo de tres tramos principales:
De Alcalá a la Red de San Luis
La Red de San Luis es un nombre que se va perdiendo y se refiere a ese pequeño nudo de comunicación que se formaba entre Montera y la hoy Gran Vía, el tramo final de la Calle Montera, cuando esta se ensancha y abre a la Gran Vía.
Este primer tramo es uno de los más hermosos desde el punto de vista arquitectónico y acoge algunas de las tiendas históricas que sobreviven al empuje de las grandes cadenas de franquicias y marcas internacionales.
Encontrarás locales que mantienen viva la memoria de una época en la que la Gran Vía era sinónimo de distinción y elegancia
No obstante, los nuevos tiempos se abren paso y atraen a nuevas marcas globales y populares.
Barrio de Las Letras: cruzando la calle de Alcalá, se llega a un barrio de pequeñas callejuelas en torno a la Plaza Santa Ana, donde está el bronce de Federico García Lorca. El Barrio de las Letras es una zona sin entidad administrativa pero históricamente vinculada al mundillo de los escritores y editores.
Es donde vivió y murió Cervantes, para nombrar solamente al más ilustres de todos.
De la Red de San Luis a Callao
En la Red de San Luis comienza el tramo central y más populoso de esta calle, donde encontramos algunas de grandes tiendas que hoy ocupan antiguos cines o reavivan el esplendor de antiguas galerías comerciales que quisieron rivalizar con las de París.
En el número 28 se levanta el maravilloso edificio Telefónica, antigua sede de esta compañía de telecomunicaciones y que hoy acoge una gran tienda de tecnología y un espacio cultural. La torre del reloj se hace notar por su altura y por su masa. Parece trasplantada de alguna capital de Europa del Este.
Numerosas firmas de moda para todos los gustos abren sus puertas en este tramo. Una de las tiendas que atraen a más visitantes es H&M, cuyo local del número 37 deja ver el oropel del antiguo cine Avenida y de la mítica sala de fiestas Pasapoga, por donde pasaron desde espías nazis, a estrellas como Ava Gardner o Gary Cooper; o Primark Gran Vía: la tienda más grande y visitada de España, cuyo impactante espacio en el número 32 ha causado furor.
Entre tantas firmas internacionales de moda, merece la pena detenerse en el número 29 para perderse por las escaleras y rincones de La Casa del Libro, una tienda que ha visto pasar el siglo XX y que mantiene un enorme catálogo donde los best seller no excluyen los manuales académicos especializados.
De Callao a Plaza de España
Al pie del edificio Capitol y su famoso cartel luminoso de Schweppes, arranca el último tramo de la Gran Vía. Desde aquí a Plaza de España encontrarás un sinfín de tiendas de recuerdos para turistas.
La Gran Vía se transforma en Calle de la Princesa al pasar entre la plaza y el gigantesco Edificio España. En el centro de la plaza, la ciudad rinde homenaje a Cervantes con un monumento, una estatua y bronces de sus dos inolvidables personajes: Don Quijote y Sancho Panza.