Notre Dame tiene 850 años y su última restauración importante tuvo lugar en el siglo XIX. La entrada es gratuita y es el Estado francés quien se encarga de invertir los 2 millones de euros anuales necesarios para mantenerla. Pero ahora se necesita realizar un trabajo de infraestructura más grande y bastante más costoso.
El arzobispo de París, André Vingt-Trois, espera recaudar 100 millones de euros para restaurar la catedral de Notre Dame.
La catedral, ubicada en la Isla de la Cité y una de las más conocidas del mundo, corre peligro: la cantidad de turistas, más la contaminación parisina y la antigüedad del edificio, están afectando sus famosas gárgolas y arcos.
Notre Dame se desmorona
Alrededor de 14 millones de personas visitan todos los años el monumento parisino del siglo XII, considerado uno de los mejores ejemplos de arquitectura gótica. Para André Vingt-Trois, la misma fama que contribuye al deterioro del edificio puede salvarla.
Se espera que su prestigio mundial ayude a atraer donantes de varios países
"Si no hacemos esta restauración, vamos a empezar a ver como el exterior de la catedral se cae a pedazos. Es un tema muy serio", dijo a la agencia Reuters Michel Picaud, presidente de la asociación Amigos de la catedral de Notre Dame, una ONG creada por el arzobispado de París.