Qué ver en París es lo que preguntan y comentan los viajeros en las redes. Un paseo por el Sena disfrutando el atardecer o un café en una esquina poco transitada, son sin duda un un símbolo para los enamorados.
En esta entrada hablaremos de 10 increíbles rincones de la capital francesa.
Qué ver en París - Sus imprescindibles
Decir que París tiene tan sólo 10 imprescindibles sería minimizar una ciudad que tiene tanta belleza para ver y recorrer, pero mientras vas de un lugar al otro, seguramente irás descubriendo otras maravillas y armando tu propia lista.
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La Torre Eiffel
La Torre nunca pasará de moda. Más de 7 millones de personas la visitan cada año, con lo que se ha convertido en el monumento pago más visitado del mundo.
La parpadeante Torre Eiffel se asoma desde cada rincón de la ciudad dándole al lugar todo un halo de magia y misticismo para los amantes en general.
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El Moulin Rouge
El cabaret por el que todos sentimos curiosidad y anotamos para visitar tras ver la película de Ewan McGregor y Nicole Kidman.
Construido por el español Josep Oller, este cabaret era ya muy famoso mucho antes de este filme: hasta el mismísimo Frank Sinatra ha actuado en él. Una curiosidad: el Moulin es el mayor consumidor privado de champagne del mundo.
La Catedral de Notre Dame
El kilómetro 0: En pleno centro de París, la plaza en la que se encuentra la Catedral de Notre Dame es el kilómetro 0 de todas las carreteras francesas.
Sus famosas gárgolas observan toda la ciudad desde arriba y reciben miles de flashes cada día, pero Notre Dame es mucho más que eso. Esta joya del gótico, finalizada en el siglo XIII, fue escenario de la coronación de Napoleón Bonaparte.
El Louvre: la casa de la Gioconda
La Gioconda de Da Vinci es el cuadro más famoso del mundo y es el Museo del Louvre el que lo puede exhibir con orgullo.
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Con un robo a sus espaldas, la misteriosa Mona Lisa se encuentra ahora protegida por un cristal antibalas y un perímetro de seguridad. Aunque hay muchísimo arte en ese museo, es inevitable detenerse en este cuadro a pesar de las intensas aglomeraciones.
La Basílica del Sagrado Corazón: la joya de Montmartre
Esta basílica deja a todo el que la visita con ganas de volver. Aunque es mucho más reciente que la Catedral de Notre Dame, bien merece estar entre las visitas obligadas en París.
Visitarla te deslumbrará, tanto por su magnífica belleza como por las vistas panorámicas que se tienen de toda la ciudad desde ella, ubicada en la colina de Montmartre.
Montmartre
Ee el barrio bohemio de París, el barrio en el que intelectuales, músicos, pintores y todo tipo de artistas deciden pasar sus horas. Pintores como Van Gogh, Renoir, Picasso, Dalí, Pissarro, Degas o Manet han sido algunos de sus ilustres vecinos.
Pasear por él es respirar arte. Sentate con alguno de los pintores y disfrutá de una maravillosa tarde en la plaza tan famosa.
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Campos Elíseos
Un paseo por los Campos Elíseos hasta el Arco del Triunfo es un recorrido que te transportará. 12 calles confluyen en el Arco del Triunfo más reconocido del mundo y una de las más famosas, sino la más, es la Avenida de los Campos Elíseos.
Pasear por ella desde la Plaza de la Concordia hasta el Arco del Triunfo es un placer especial y una vez en el monumento, no dejes de subir porque las vistas son espectaculares.
Ópera Palais Garnier
Disfrutar de un ballet en la Ópera es otro imprescindible. También llamada Palais Garnier es uno de los edificios más suntuosos y sorprendentes de París, tanto por dentro como por fuera.
Obra de Garnier bajo encargo de Napoleón III, se inauguró en 1875, ya muerto este último. Las óperas ahora se hacen en la Bastilla, pero el Palais Garnier se sigue utilizando para la representación de ballets.
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La Estatua de la Libertad
Aunque pueda parecerlo no nos hemos equivocado. Hay una Estatua de la Libertad en París, una réplica de la original, que fue un regalo de Francia a Estados Unidos y diseñada por Gustave Eiffel.
La que se encuentra en París, de algo más de 11 metros de altura, fue un regalo precisamente de Estados Unidos a Francia en el centenario de la Revolución Francesa. Pero no es la única réplica que existe: hay otra en Tokio, otra en Colmar (Francia), otra en Brasil y hasta dos más en Argentina. Libertad para todos.
Las Galerías Lafayette
De compras o, al menos, de visita, si el bolsillo no lo permite es otra visita que hay que hacer. Las Galerías Lafayette son todo un icono de la capital francesa y más allá del hecho de comprar algo o no, merece la pena una visita.
Cerca de la Ópera Garnier y los grandes bulevares parisinos se encuentra la mayor superficie comercial del mundo occidental, imponente con una majestuosa cúpula. Recibe más de 20 millones de visitantes al año.
Barrio Latino
Se encuentra ubicado al sur de la Île de la Cité y es una de las zonas más concurridas y animadas de la ciudad, un lugar en en que de noche no creerás estar en Europa ya que encontrarás los bares llenos de gente hasta muy tarde.
El Barrio Latino debe su nombre a la Época Medieval, cuando los habitantes de la zona eran estudiantes que utilizaban el latín para comunicarse.
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Desde la Edad Media los estudiantes del Barrio Latino tuvieron una gran influencia sobre Francia, y durante los siglos XIX y XX llevaron a cabo movimientos estudiantiles de gran trascendencia política:
El barrio latino fue uno de los puntos calientes durante la Revolución de Mayo del 68 o Mayo francés
En el barrio latino todo son restaurantes y cafeterías que ofrecen agradables terrazas con precios bastante asequibles. Aunque hay varias calles con restaurantes muy agradables, una de las principales arterias del barrio es la Rue Huchette.