La Alhambra es uno de los complejos palaciegos más bonitos de la época musulmana y al mismo tiempo la fortaleza más bella de España. Esta ciudad palatina situada en Granada, perfectamente integrada en la naturaleza, es una obra musulmana brillante.
Tan ricamente decorado, tanto su exterior, como interior dejan a cualquiera sin palabras
En el año 2011 recibió casi tres millones de visitantes, que le convirtieron el monumento más visitado de España.
En árabe, La Alhambra significa “fortaleza roja”, existen muchas teorías que tratan de explicar porque la denominaron roja, una de ellas dice que los trabajadores que la construían trabajaban de noche y vista desde lejos, debido a la luz de las antorchas que se utilizaban para iluminarla se veía completamente roja.
La Alhambra es una fortaleza gigante que ocupa la mayor parte de cerro Medina, servía como residencia al monarca y la corte del Reino Nazarí de Granada.
Se trata de la única Ciudad Palatina de época islámica que se conserva en la actualidad, aunque de los seis palacios y dos torres-palacios que albergaba, tan sólo quedan en pie el de Comares y el de Los Leones. En el interior de esta ciudad encontramos impresionantes edificios.
El Cuarto Dorado de La Alhambra, conocido como el Patio del Mexuar, únicamente se conoce que fue adaptado para Isabel de Portugal durante su estancia en La Alhambra, aunque ella nunca llego a disfrutarlo.
Tiene una decoración hasta el último detalle, donde destacan las piñas y conchas, ventanas cubiertas con celosías, madera de cedro, las pinturas góticas y también escudos y emblemas de los Reyes Católicos.
En este cuatro existen dos puertas, una lleva al palacio y la otra no lleva a ningún lugar, la puerta que da acceso al palacios es sencilla y la otra mucho más compleja. La intención fue confundir los ladrones y también a los asaltantes.