El síndrome de Casandra alude generalmente a la indiferencia con que pueblos y estados desoyen los pronósticos apocalípticos. Las consecuencias nos sacuden en todo el mundo.
Le toca ahora a París que se prepara para una inundación histórica. Las autoridades estiman que podría ser la más importante desde la que tuvo lugar en 1910, cuando el río Sena inundó la capital francesa.
Los ejercicios de evacuación, bautizados como ‘Operación Sequana’, han comenzado este lunes y durarán hasta el 18 de Junio. El Instituto de Ordenación Territorial y Urbanismo de la región parisina ha hecho una recreación de cómo quedaría París en caso de sufrir la inundación.
Hasta 90 instituciones y empresas se han involucrado en salvaguardar la ciudad, su periferia y otros cuatro departamentos franceses.
Los simulacros han empezado este lunes en la Casa de la Radio, con ejercicios que contemplan una subida de los niveles del río de 50 centímetros diarios.
Las cifras del simulacro que comenzó este lunes y se prolongará durante dos semanas, son más de 900 profesionales de salvamento, 150 policías, 4 helicópteros y 20 vehículos pesados. El objetivo es dar respuesta a lo que se ha denominado la crecida del siglo, una subida de más de 8 metros del nivel de agua del Sena.
Según las autoridades, una crecida parecida a la de 1910, que superó los ocho metros y medio de altura, se traduciría en 500 km2 de territorio anegado y en varios millones de habitantes afectados por el fenómeno.