Conocido también como el Parlamento de Inglaterra e inscripto en la lista de Patrimonio de la Humanidad, es uno de los principales atractivos de la ciudad.
El Palacio de Westminster se construyó para ser la principal residencia de los Reyes de Inglaterra. En la actualidad es la sede del Parlamento de Inglaterra y el lugar donde se realizan las ceremonias más importantes del país.
Es sin duda, el mejor ejemplo del estilo neogótico que encontramos en esta ciudad. La ostentosa fachada del edificio ofrece un bello panorama, mientras los pináculos dorados y las estatuas de los reyes se reflejan en el río.
El actual Palacio es una reconstrucción del anterior edificio, que se vio afectado por un incendio en 1835. Pasados varios años se comenzó a construir un elegante edificio con mucho estilo. El trabajo duró más de veinte años, y finalmente se terminó en 1870.
Una gran parte de la belleza del Palacio de Westminster se debe a sus muchas torres. La más alta de todas es la Torre Victoria que mide casi 100 metros de altura. Pero a pesar de ser la más alta, no es la más famosa, ya que este lugar lo ocupa la popular Torre de Isabel, la Torre del Reloj, más bien conocida por su campanario Big Ben.
Cabe destacar que aunque toda la torre es conocida como Big Ben, en realidad ese nombre lo recibe una de sus campanas, que pesa 14 toneladas. Las campanadas del Big Ben se pueden escuchar cuando los enormes relojes marcan las horas en punto cada día.
Como anécdota, destacamos que se considera uno de los relojes más fiables del mundo, tanto que durante la II Guerra Mundial, cuando parte del Palacio volvió a ser destruida, el reloj siguió funcionando y manteniendo la puntualidad inglesa que le caracteriza.
El exterior del Palacio es solo el comienzo, ya que su gran belleza exterior, hará que no puedas resistir entrar para recorrer su bellísimo interior.
Esta maravillosa construcción gótica en su interior cuenta con más de 1000 habitaciones, que están esparcidas por sus 5 kilómetros de pasillos, que no dejan de sorprender.
En el primer piso del edificio están situados las principales salas del Palacio, también las cámaras, los vestíbulos y las bibliotecas. Las principales visitas en el interior del palacio son la Cámara de los Comunes, la Cámaras de los Lores y el Salón de Westminster.
El Palacio de Westminster es una de las visitas más interesantes en Londres, acercarse para contemplar su belleza por fuera y luego atravesar las majestuosas puertas de este Palacio, es una experiencia inolvidable y la mejor forma de descubrir su historia, que se remonta desde la época medieval.
Podrás elegir recorrerlo con un guía, o también con audio guías que están en todos los idiomas y son maravillosas. Te enterarás la forma tan extraña en que los Lores o los Comunes, emiten su voto; y también te divertirás al escuchar que aún en la actualidad, se le sigue cerrando la puerta en las narices al delegado de la Reina.
La Reina de Inglaterra tiene prohibido entrar en la Cámara de los Comunes, no por algo que haya hecho ella, sino por lo que hizo Carlos I, Rey de los ingleses en la primera mitad del siglo XVII. Y quizás para que no se le olvide, hoy en día se le sigue dando un portazo a su emisario durante el acto de apertura del año parlamentario.
El portazo anual a la Reina
Cada año la Reina acude a Westminster para la apertura del año parlamentario. Siguiendo un protocolo estricto, se sienta en su trono en la Cámara de los Lores para realizar su discurso. Los Lores acuden ese día con sus vestidos tradicionales en rojo (color de la corona), la Reina hace un pequeño gesto para que el Black Rod (nombre que proviene de la vara negra que lleva) vaya a la Cámara de los Comunes a llamar a los parlamentarios electos y acudan a la Cámara de los Lores a escuchar el discurso.
El Black Rod recorre el largo pasillo y cuando está a punto de llegar a la puerta abierta de la Cámara de los Comunes, ésta se cierra de golpe en su cara, acto que representa la independencia de esta cámara con respecto a la corona. Golpea la puerta tres veces y una vez la puerta se abre, transmite la petición de la reina a los comunes. Estos, encabezados por el Speaker, el primer ministro y el jefe de la oposición, se dirigen a la Cámara de los Lores donde ocupan un reducido espacio en la entrada. Allí escuchan el discurso de la Reina, que ha sido redactado de principio a fin por el gobierno y del cual no puede cambiar ni una coma.
Información práctica para visitar el Parlamento de Londres
El Palacio de Westminster sólo se puede visitar los sábados y durante los meses de verano. Las entradas se pueden conseguir el sitio, o haciendo cola el mismo día, pero es recomendable llegar pronto.
Si lo que te interesa es adentrarte en una de las sesiones parlamentarias, deberás acercarte de lunes a jueves a la entrada de la calle St Margaret. Algunos viernes también hay sesión de debate.
Horarios: Sábados, 9:15h-16:30h.
Agosto, lunes, 13:15-17:30h y martes a sábado, 9:15h-17:30h.
La segunda quincena de septiembre también se puede visitar en horario 9:15h-16:30h. Los festivos está cerrado.
Tarifas visitas guiadas: Adultos, 25£. Estudiantes y mayores de 60 años, 20£. NIños 5-15 años, 10£. Menores 5 años, gratis con una entrada de adulto.
Tarifas visitas con audioguía: Adultos, 18£. Estudiantes y mayores de 60 años, 15,50£. NIños 5-15 años, 7,20£. Menores 5 años, gratis con una entrada de adulto.
Si te interesa acceder a un debate mirá los horarios aquí.